Como no teníamos claro los rastros de la poca borrasca caída nos decidimos a resacar Rifarrera.
Se cierra por la Plañera y por Rifarrera soltando los perros Ibán, Irigaray y Juanjo.
Este paso es el que estoy guardando.
Se ven los carrerores pero están poco transitados y de viejo.
Nada mas soltar los perros salen en dirección a Abesué teniéndoles que dar la vuelta por los punteros en varias ocasiones hasta que se pasan tres perros.
Los resacadores no ven rastros y al final no sale nada de nada.
La mañana ha sido muy fría hasta los que les tocaba el sol se quejaban, los que estábamos a la sombra ni te cuento, he estado a punto de hacerme fuego.
Afortunadamente hemos recogido todos los perros.
Aun faltan tres de los cuatro que se quedaron hace un mes de la cacería de Escagües.
Cuando ya nos retiramos y a la hora de coger el coche, como tenia las manos ateridas de frío no acertaba a poner los números correctos del antirrobo, a la tercera se me ha quedado bloqueado.
Según las instrucciones hay que sacar la llave de contacto y esperar media hora.
Como tenia tiempo me he ido a ver los pasos de un barranco de Rifarrera donde se cerraba y después los habían limpiado los que aguardaban en ese lugar.
He tardado como una hora, el coche no responde con el antirrobo bloqueado.
He vuelto a esperar otra hora y nada de nada que sigue bloqueado.
Como empezaba a nevar he avisado a la grúa, mientras Eduardo me ha bajado a la Pedomí.
Cuando ha llegado la grúa hemos subido por la pista y antes de cargar otra prueba de arranque, inútil el antirrobo bloquea el arranque.
Cuando hemos bajado a la Pedomí, otra prueba de arranque, nada mas poner la llave de contacto me he dado cuenta que ya estaba desbloqueado y así ha sido introducir los números correctamente y arrancar.
Para tirar el coche por un barranco y después pegarle fuego o al revés da lo mismo.
Total 42 + 0 = 42
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