Desde un principio se tenia claro donde teníamos que ir por los rastros en los campos de Chisagües.
Cerramos en San Quilez y el barranco de las Opacas así como por la parte alta de los campos.
Sueltan los perros Iban, Frechín y Gílo.
Los perros parece que hoy no tienen ganas de cazar o que no encuentran nada.
Valentín dice que ha visto un tocino mediano, pero no sabemos mas de el.
Casi al final parece que mueven algo y Escalona que está en un alto ve un jabalí que se estaba rascando en su coche que había dejado en la pista. en cuanto se sale de la pista y entra en los campos le manda dos pepinos pero después de rascarse y haberle mandado estos dos proyectiles se puso a aplaudir con las orejas.
Detrás pasa un perro sin decir nada.
La cacería sigue pero muy aburrida, Frechin en contra de su constumbre no nos anima la mañana con sus comentarios cuando resaca, se ha contagiado de la cacería en general y nos hemos pegado cinco horas en los pasos sin saber casi nada, los que estábamos en el barranco solo el sonido del agua y los pocos comentarios de los resacadores por las emisoras, menos mal que el día es bueno y no se nota nada el frío.
Este es el paso que estaba guardando
Por debajo de esta curva también pueden pasar, hay que estar otro puntero si no adiós tocinos y perros.
Como te pueden ver desde el otro lado del barranco y darse la vuelta, me he preparado un pequeño tapadero.
Al final del todo y cuando ya estamos retirándonos de los pasos, Escalona avisa que los perros tienen muchos problemas fuera del resaque, en Las Mosqueras.
El se baja a Parzán y avisa que suben cinco o seis jabalíes por la pacina, como ya estamos en la pista, se toman posiciones en aquellos lugares donde hay una buena vista de por donde suben los bichos.
Son localizados en dos zonas abiertas del monte y a partir de aquí aquello parece una guerra por la cantidad de disparos que se oyen, por la forma de tirar no podían apuntar ni al monte que tenían enfrente, imposible.
Algunos han tenido que buscar un barranco con agua para enfriar el cañón del rifle y tendrán que ir a la armería a reponer cartuchos.
Aquí han tenido que venir a enfriar las escopetas y los rifles.
Después de tirarles en dos sitios el resultado es cero y lo peor que el monte se queda sembrado de perros, lo menos diez que no salen y como oscurece todos a casa.
Mañana tocara salir a recoger perros.
Total 25 + 0 = 25
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