Se cierra en el barranco Montillo, paso Patrón, Isabelica, la punta la Raya, la canal del Lupo, el cerro la Collada, la Feixanga y Crucillas.
Resacan Toño Lobez , Iban y Carlos.
A algunos jubilados nos mandan a la sombra todo el día lo que tendrá consecuencias en el reúma, catarros y todas las enfermedades propias de la edad, alguno ha estado con los pies mojados todo el día por haberse caído al agua del barranco.
Le hubieran ido bien unas plantillas que me enseñó un socio ayer, con calefacción y mando a distancia, no me lo creía, pensaba que me tomaban el pelo hasta que me las enseñó.
Empieza el resaque como la víspera los perros van y vienen, llegan a los pasos y nada, Carlos desesperado porque no los encuentra.
Al final ve un jabalí que enfila con perros hacia la parte alta del resaque y se oye tirar, ha caído uno.
Vuelta a resacar y a mover los perros de sitio, nada de nada.
Ya dan la orden de retirada cuando Carlos que también se retiraba pasa por una zona enfrente del paso Isabelica y le salta de los pies un tocino, los perros lo siguen, se avisa al puntero que estaba en la Feixanga y se había retirado que corriera a ocupar el paso otra vez, al momento se le presenta un jabalí y también lo cobra.
Bueno ya tenemos dos y dicen que gordos.
Toño Lobez también se está retirando, le pregunta a Carlos que por donde los había movido, baja por esa zona y le saltan dos mas también gordos que se escapan por encima del paso Isabelica.
Se quedan bastantes perros en el monte, habrá que ir a buscarlos pues es increíble el recorrido que vemos con los localizadores, ahora parecen máquinas y no paran, la próxima vez que se vaya a cazar habrá que soltarlos la víspera a ver que pasa.
Al final se ha descubierto el misterio de donde se habían escondido los jabalíes durante el resaque: en la cuadra de Escagües como lo demuestra este vídeo.
Si observáis a la derecha veréis como los pequeños han entrado por la puerta.
Total 47 + 2 = 49
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